En la próxima sesión que tendrá lugar el 29 de noviembre, comentaremos el libro de Fernando Arrabal: Pic-Nic, El triciclo y El laberinto.
Fernando Arrabal (Melilla, 1932-). Creador polifacético, residió en Melilla hasta 1939, en Ciudad Rodrigo hasta 1946 y en Madrid hasta 1955. En esa fecha, abandonó España “por motivos de libertad”, y se estableció en París, su residencia permanente desde entonces.
Autor prolífico ha publicado una docena de novelas; dos centenares de libros de poesía (algunos en forma de libro de artista, ilustrados por Dali, Magritte, Amat, Picasso, Saura…); varios ensayos, libros de ajedrez, cinco libretos de ópera y su famosa Carta al general Franco en vida del dictador. También ha dirigido siete largometrajes. El mayor reconocimiento surge de su faceta como dramaturgo: es autor de más de un centenar de obras entre las cuales: Fando y Lis, La noche también es un sol, Jóvenes bárbaros de hoy o Las delicias de la carne.
Tras permanecer tres años en el grupo surrealista, funda en 1963 el «movimiento pánico» junto a Alejandro Jodorowsky y Roland Topor. Ha sido vinculado a movimientos que van desde el postismo o los beatnik a diversos grupos renovadores contemporáneos. Es miembro de la escuela patafísica.
Figura controvertida, su obra ha recibido el aplauso internacional (Gran Premio de Teatro de la Academia Francesa, el Nabokov de novela, el Espasa de ensayo, el World’s Theater o el Alessandro Manzoni di poesia…). Fue Premio Nadal en 1982 con la novela La torre herida por el rayo y Premio Nacional de Teatro en 2001 por su obra El cementerio de automóviles. En 2005 recibió la Legión de Honor de la República Francesa.
Pic-nic, El triciclo y El laberinto pertenecen al llamado ‘primer teatro’ de Arrabal. La tres comparten un especial surrealismo, una tendencia al absurdo en la que el autor asume la mirada del niño y nos situa en un universo cerrado y sin perspectivas con personajes desarraigados y marginales que se debaten en un mundo hostil, el de su propio presente, dentro de un sistema que no entienden y alienante. De lectura amena.
En Pic-nic, Arrabal denuncia el absurdo de la guerra en lo que aparentemente es una breve obra cómica. Sin embargo, su final, nos llevará a considerarla desde otra perspectiva.
El triciclo, deudora de los hermanos Marx de los que Arrabal es gran admirador, nos muestra el modo de vida de dos indigentes, Climando y Apal, que agobiados por el pago de un plazo de su triciclo acaban con la vida de un hombre con billetes. Un guardia, de lenguaje incomprensible, los detendrá y los condenará.
El laberinto, que el autor pensó inicialmente en titular Homenaje a Kafka, hace evidente la influencia del escritor checo en Arrabal. En él encuentra la forma de expresión adecuada para exponer el proceso trágico y ridículo de un hombre acorralado: una clara referencia autobiográfica que recuerda la figura de su padre, desaparecido de la cárcel de Burgos cuando Fernando Arrabal tenía diez años.
+ Información
Web del autor
El teatro de Fernando Arrabal
Esperamos vuestros comentarios.
1 comentario
Miguel
30 noviembre, 2010, a las 0:52 am (UTC 2) Enlace a este comentario
Acercamiento a Arrabal y su mundo, que no deja indiferente.
Infantil, esquizofrénico, histriónico, absurdo, irónico, humorístico, seguramente lleno de referentes y teatral por encima y por debajo de todo, así ha sido mi lectura.